domingo, 24 de julio de 2011

¡FELICES VACIONES A TODOS!

Con los calores del verano el curso llega a su fin. Es tiempo de recargar pilas.
Para los padres es el momento de vivir intensamente la convivencia con sus hijos. No perderse ni un segundo de ese maravillosos proceso que es el crecimiento y maduración de sus pequeños, sobre todo de tomar consciencia para ejercer como apoyo y facilitador de experiencias enriquecedoras.
Para el profesorado es hora de hacer balance, renovarse por dentro y llenar el depósito de paciencia y cariño para derramarlo sin límites llegado el nuevo curso.
Quiero dar las gracias a todos aquellos con los que he tenido el privilegio de relacionarme este curso. A los padres que con su amor y valentía siguen haciendo los equilibrios necesarios para dar a sus hijos los mejor de ellos mismos.
A los profesores (profesoras en su mayoría), porque son un ejemplo día tras día de amor y paciencia, comprensión y dulzura en esa dificilísima tarea de atender a 8 bebés, o 13 casi bebés de 1 año, o a 20 pequeñines exploradores de 2 años. Hay que ser una verdadea maga para conseguirlo.
A los pequeñines que siempre reciben con abrazos y sonrisas cualquier gesto de aceptación.
También a los abuelos. Qué pasaría sin esas solícitas abuelas y abuelos que anteponen el bienestar de sus nietos al suyo propio, que les cuentan cuentos, les enseñan juegos estupendos y tienen todo el tiempo para escuchar lo que sus nietos tienen que contarles.
A los compañeros de atención temprana que potencian el desarrollo en los niños con más problemas.
A todos, gracias. Espero que nos encontremos el curso próximo con fuerza renovada.

martes, 12 de julio de 2011

MI BEBÉ ESTA EN CASA, Y AHORA QUÉ

Ser padres es algo que la mayoría de las personas quieren experimentar. Pero el cansancio del embarazo y el parto junto con el miedo a no saber enfrentar las nuevas situaciones a las que expone la crianza de un bebé, puede llevar a los padres a una situación importante de estrés. Si a esto unimos los consejos contradictorios de familiares y amigos, la situación puede llegar a ser caótica, lo que dificultaría la relación con la criatura.
Existen básicamente tres líneas de actuación en la crianza de los bebés. Los que piensan que el cordón umbilical hay que cortarlo poco a poco a medida que el niño va adquiriendo destrezas para enfrentarse al mundo. Es típico de las crianzas observadas en algunos pueblos indígenas. Las mamás portan a los bebés en bolsas ajustadas al cuerpo, descansando sus cabecitas sobre el seno izquierdo. Oir el latido del corazón los tranquiliza, además de tener acceso directo al pezón siempre que lo deseen. Este método llamado del continuum defiende que la seguridad que les aporta este apego con la figura materna los hará personas seguras y emocionalmente estables. 
En los años 40 y 50 del siglo pasado se abogó por un método basado en la rigidez de normas y creación de rutinas inquebrantables. Se intentaba minimizar al máximo el impacto que la venida de un bebé a la casa puede ocasionar. El método, más idóneo para instituciones de crianza con poco personal a cargo que para familias con una afectividad normal, fue ideado por el doctor Truby King, y aquí podeis ver un video al respecto. Sobran los comentarios.
Para la mayoría de personas que conozco, lo sepan o no, impera un modelo de crianza más cercano a la que postulaba el doctor Spock. Su método se podría resumir como: escucha a tu hijo, demuéstrale que le quieres y confía en tu instinto, esto último lo expresaba con una frase que se hizo famosa dirigida a las madres: "usted sabe más de lo que cree". Esta línea en España está abanderada por el doctor Carlos González con el postulado de la crianza natural.
Mis principios
.- Confia en tí para que tu hijo pueda criarse en un ambiente confiado.
.- Escucha a tu bebé, aprenderás a entenderlo muy pronto.
.- Las normas al principio de la vida las imponen los propio bioritmos, respétaselos.
.- Disfrútalo y que disfrute de ti.
.- Destierra los complejos de culpa o criarás un tirano.

miércoles, 6 de julio de 2011

Conciliación de la vida familiar y laboral

“La energía que el hombre y la mujer dedican a la producción de bienes materiales aparece cuantificada en todos nuestros índices económicos.  Pero la energía que el hombre y la mujer dedican a la producción, en sus propios hogares, de niños felices, sanos y seguros de sí mismos, no cuenta para nada en ninguna estadística. Hemos creado un mundo trastornado” 
                                                       John Bowlby

Comenzamos con una frase rotunda del precursor de la teoría del apego porque nos hace pensar sobre la realidad de nuestros niños.
La incorporación de las mujeres al trabajo fuera de casa, la crisis económica o el gusto por una vida acomodada, hace que las jornadas laborales se alarguen en detrimento de la vida familiar a pesar de que la ley dé cada vez más cobertura.
Pero la verdad es que los niños jamás han estado antes tanto tiempo desde edades tan tempranas debiendo compartir atención y cuidados en competición con otros niños de la misma edad y necesidades en situación estructurada.
Estamos en un mes tradicionalmente vacacional para los niños, pero las escuelas infantiles estan llenas, y cada ves más instituciones de recreo, llámense club sociales o gimnasios, ofertan atención a los pequeños en forma de actividades lúdicas, mientras los papás trabajan.
También observamos con perplejidad que existen familias que pudiendo dedicar más tiempo a sus hijos prefieren dejarlos en estas instituciones en aras de una supuesta mayor sociabilidad, desarrollo mental, etc.
No les interesa saber que las relaciones tempranas moldean el cerebro. Karl A. Menninger, psiquiatra norteamaericano decía, lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad. ¿Si les damos desapego qué recibiremos?
Una verdadera conciliación familiar pasa por posibilitar que los niños tengan la atención cuidadosa de unos padres amorosos, maduros, capaces de satisfacer las necesidades físicas, afectivas y emocionales de sus hijos por un periodo nunca menor a dos años. Para conseguir esto necesitamos el clamor de una sociedad consciente que comprenda la necesidad y quiera hacerla posible.

viernes, 1 de julio de 2011

FICHAS NO, GRACIAS

Desde los años 90 las editoriales están teniendo, a mi entender, un protagonismo excesivo en el hecho educativo, tanto en el segundo ciclo de infantil como en educación primaria y secundaria.
Ahora también están llegando a la escuela infantil.
Los niños, sobre todo a partir de 2 años tienen material escolar propuesto por las editoriales al uso y que además incluye propuesta curricular y didáctica para el centro y el profesorado .
Valdría la pena analizar qué tipo de propuestas didácticas hacen las editoriales para nuestros niños de hasta tres años. Aunque quizás habría que empezar preguntándonos ¿es necesario que los niños de 1 y 2 años hagan fichas?
Según la mayoría de las tutoras de infantil a sus alumnos les encanta hacer fichas. Cabría preguntarse, dando por sentado que esto sea así, qué ocurre para que a los pequeños con necesidades perentorias de exploración del espacio y los objetos, desarrollo de su autonomía, descubrimiento de sí mismo y los demás, le sea tan gratificante este trabajo en el que tienen que estar sentados realizando la misma actividad en tiempo estándar.

¿Qué aporta el trabajo estructurado para que sea gratificante?
Es cierto que las editoriales poseen grandes medios para hacer atrayente un material: colorido, diseño, materiales manipulativos como gomets, troquelados, etc., pero resulta difícil pensar que para un niño de , incluso un año, le resulte atractivo un papel de espacio tan limitado con el que tiene que interactuar de forma aún más limitada. ¿Entonces qué ocurre?
La situación estructurada provoca seguridad. En una situación donde cohabitan hasta 20 niños de 2 a 3 años o 13 de 1 a 2 años, las situaciones desestructuradas siempre son fuente de conflicto. Trabajar en su ficha garantiza que no debe disputar con nadie sobre ese objeto, que puede manipularlo sin lucha y si alguno se salta este principio el adulto responsable estará más alerta que en situaciones desestructuradas, pues el material de trabajo goza de una consideración especial.
Pero que esto sea un hecho no significa que esté bien. Cuando un niño elige realizar un trabajo estéril, alejado de sus necesidades primarias en lugar de hacer lo que su empuje evolutivo le demanda algo no va como debe.

Puntos de reflexión.
No pretendo pontificar pero sí aportar mi visión como punto de debate.
1º Los niños de 1, 2 e incluso durante, al menos el primer trimestre de los tres años, tienen unas prioridades evolutivas que no casan con la realización de una ficha por muy atractivo que sea el material.
2º Entiendo que las editoriales ofrecen un proyecto curricular y la programación de aula, pero no se debe perder de vista que lo importante es elegir una metodología ceñida a las necesidades reales del niño.
3º Por último y no por ello menos importante, comienzo a ver en el profesorado de infantil la misma angustia que veía en el profesorado de primaria por realizar todas las fichas que vienen en el método, quitándole tiempo a la propuesta abierta de exploración y construcción del propio conocimiento que debe llevar aparejado todo buen aprendizaje.